15º ORDINARIO

CANTO DE ENTRADA: “Ven a la fiesta”

MONICIÓN DE ENTRADA: 

¡Bienvenidos a la celebración de nuestra fe! Jesús con esta parábola nos trae la buena Noticia de que mientras estamos vivos siempre es posible dar frutos, y buenos frutos. ¿Cómo hacemos para dar buenos frutos? Dejando que Dios mismo que viene con la semilla de su Palabra ilumine toda nuestra vida.

La semilla ya es buena, pero la tierra siempre tiene que ser mejorada. La clave es escuchar la palabra y dejar que se grabe en nuestro corazón. De ese modo, todo el mensaje de amor de Jesús llegará a todas las cosas que hagamos transformándolas en frutos buenos. ¿Cómo?:

escuchándola con atención,  recordándola en la oración, y poniéndola en práctica con amor…

ACTO PENITENCIAL:

–Perdónanos Señor, porque el egoísmo y la envidia no nos dejan ver con claridad a los demás. Señor, ten piedad

–Perdónanos Señor, porque nuestra comodidad o prejuicios no nos dejan ver a los que necesitan de nosotros para que les echemos una mano. Cristo, ten piedad 

–Perdónanos Señor, porque hay muchas cosas que nos nublan la mirada y sólo tenemos ojos para ellas y no para las personas. Señor, ten piedad

CANTO: Gloria

ORACIÓN COLECTA: 

Padre bueno que nos fecundas con tu Palabra, concédenos guiarnos en todo por su luz para que podamos actuar con su fuerza. PJNS.

LITURGIA DE LA PALABRA                                                                                                      

LECTURA: Isaías 55,1011  

CANTO: “Escucha tú, la palabra de Dios”                                              

EVANGELIO: Evangelio según San Mateo 13, 1-23

HOMILÍA: 

Frase para comentar: 

Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende;

ése dará fruto y producirá ciento o sesenta o treinta por uno (Mt 13,23)

Imagen para comentar: 

ORACIÓN DE LOS FIELES:

–Por La Iglesia, signo de Cristo en medio del mundo. Roguemos al Señor.

–Por los que tienen alguna responsabilidad sobre los demás. Roguemos al Señor.

–Por los que mueren de muerte violenta. Roguemos al Señor.

–Por los que matan, secuestran, destruyen. Roguemos al Señor.

 –Por nosotros, llamados a trabajar por la paz y la reconciliación. Roguemos al Señor.

LITURGIA EUCARÍSTICA                         

OFERTORIO:

— Con esta bandeja de tierra queremos representar nuestro deseo de dar gusto a Dios. Es nuestro corazón. ¿OS imagináis un corazón abierto para Dios? ¡Cuánto y qué bueno podríamos hacer! Ofrezcamos al Señor la tierra de nuestra buena voluntad.

–Con esta jarra de agua queremos simbolizar la mano de Dios. Sin Él, nuestras vidas, no tendrían mucho sentido. Damos gracias a Dios porque, el agua de nuestra vida cristiana, son los sacramentos, la eucaristía, la oración, la Palabra.

— Con el pan y el vino, las ofrendas más agradables a Dios, traemos nuestro propósito firme de colaborar con el Señor en la expansión del Evangelio 

CANTO: GRACIAS PADRE POR LA ENTREGA DE JESÚS

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS: 

El sembrador cultivó el trigo que hace posible este pan; el viñador cuidó de sus vides que han hecho posible este vino; cuida tú, Padre de bondad, de cada uno de nosotros para que produzcamos los frutos que tu Palabra siembra en ella. PJNS

PLEGARIA EUCARÍSTICA

PREFACIO:

Siempre hay que darte gracias, Padre amoroso. Tú esperas que nosotros seamos la tierra buena donde esparces la semilla de tu Palabra. La acción de tu Espíritu Santo nos alienta y vivifica para que tu siembra pueda dar sus frutos y cumplir su encargo antes de volver a ti. Por eso, con todos los que están contigo en el cielo, te cantamos…

SANTO: “HOSANNA HEY”

PADRENUESTRO (cantado en el altar)

CANTO DE LA PAZ: “LA PAZ TE DOY A TI MI HERMANO”

CANTO: (este canto es para antes de la comunión, en el momento de la invitación a participar del banquete eucarístico)

«El Señor Dios nos amó

como a nadie amó jamás

Él nos guía como estrellas

cuando no exístela luz,

Él nos da todo su amor

mientras la fracción del pan,

es el pan de la amistad,

el pan de Dios.

Es mi cuerpo:

Tomad y comed.

Esta es mi sangre:

Tomad y bebed,

pues yo soy la vida

yo soy el amor.

¡Oh Señor, condúcenos

hasta tu amor!»

CANTO DE COMUNIÓN: “Alma misionera”

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN: 

Gracias porque nos has alimentado una vez más. Concédenos que fortalecidos con tu Palabra y tu Pan podamos dar los frutos que has sembrado en nosotros. PJNS. 

ORACIÓN FINAL:   

Tu Palabra
es nuestro alimento, Señor.
Tu Palabra
es la fuente donde abrevamos
la fuerza para la vida.
Tu Palabra
es la luz
que ilumina nuestro caminar.

Señor,
condúcenos al encuentro diario
con tu Palabra.
Ayúdanos a buscar
en la lectura cotidiana
de la Biblia,
el eco de tu voz
que sigue hablando en nuestra realidad.
Enséñanos a mirar el mundo y la vida
con tus ojos
a través de tu Palabra.

Danos perseverancia
para leerla con constancia.
Danos atención
para escuchar con apertura.
Danos compromiso
para vivirlos desafíos que nos plantee.
Danos alegría
para integrar a nuestra vida tu mensaje y tu voz.

CANTO FINAL: “Cosas de locos”